No hace un año todavía (el 28 de diciembre será) que inauguramos la discoteca sPyPmusic con el primer álbum de Radiohead, PABLO HONEY (1993). Luego no os puse OK COMPUTER (1997) porque pensé que era sobradamente conocido y que seguramente ya lo tenéis: muchas listas lo dan como el mejor álbum de todos los tiempos. En mi iPod he tenido siempre su siguiente obra, KID A (2000) por si me cansaba de los dos anteriores, y en julio, cuando vinieron a España, os puse THE KINGS OF LIMBS con unos comentarios poco entusiastas por mi parte.
Pero en la semana que anduvimos por Ginebra entre el Hospital de Meyrin y el Acelerador de Partículas, estuve escuchando los cuatro álbumes una y otra vez y me quedé maravillado de la calidad de estos tipos. Toquen lo que toquen, sea de 1993 como del 2012, da igual. Todo suena extraordinariamente bien. Todo te llena.
No estoy muy seguro de saber escuchar música. Ni de beber vino. Hay ratos en que el vino me sabe a gloria, pero el mismo vino, a ciertas horas, me echa para atrás. Ya que metaforeo con el vino, no va a a estar de más recordar aquel bonito refrán de "el pan cambiado y el vino acostumbrado". La primera vez que oigo un disco bueno, siempre me sabe raro. Siempre me cuesta entender y apreciar. Supongo que eso es el anuncio de que es bueno, porque cuando es malo lo noto enseguida. No lo vuelvo a poner.
Ayer sábado oí IN RAINBOWS mientras montaba muebles de Ikea y hubiera podido decir lo mismo que dije de THE KINGS OF LIMBS, que si música decorativa, que voz quejumbrosa, parecidos efectos musicales que en todos, etc. Sin embargo, horas después lo volví oí en la cocina a medio volumen y empecé a maravillarme con este doble CD tanto o más que con los anteriores.
Hago cuentas y veo que llevo ya escuchados cinco de sus ocho trabajos de estudio. Con un poco de suerte, antes del 28 de diciembre pongo los otros tres y declaramos al primer año sPyPmusic, año RADIOHEAD.
Y como siempre, ya sabéis, durante tres o cuatro meses en el sPyPdB.