jueves, 31 de marzo de 2016

831. DISCURSO DE AZUA EN LA RAE Y CONTESTACION DE VARGAS LLOSA




Ya está colgado en youtube y es un lujazo que nos permitan ver estas cosas. Por deferencia al historial intelectual de Félix hay que verlo, pero os aseguro que yo no lo pasé nada bien. De hecho, creo que al final me hubiera quedado en un respetuoso silencio y no hubiera aplaudido. Me pasé la ceremonia como cuando tengo que ir a misa por algún funeral: pensando que el mundo es muy raro.  Sentí un gran alivio cuando en las filas de atrás encontré el rostro serio, soriano, adusto, elegante, de José Angel González Sáinz. También me emocionó que Vargas Llosa mencionara directamente a Savater, allí presente, al hablar del pensador comprometido con su tiempo. Por supuesto que se dijeron muchas cosas bonitas (también en misa creo que las dicen) pero vi tantas cosas extrañas, también algunas caras indeseables, mucha beatería, había tanto olor a colonia o neftalina, tantas contradicciones entre lo que se dice y se hace, que salí hecho un mar de dudas y me costó coger el sueño. Mejor verlo a media tarde, no sea que os pase lo mismo.


martes, 22 de marzo de 2016

830. SESENTA DÍAS MÁS DE DURO TRABAJO DE NEGOCIACIÓN PARA FORMAR GOBIERNO



- Pedro, ¿eres tú? Mira, que soy Pablo. Que cuándo quedamos para lo del Gobierno?


- Que te has equivocado de número, Pablo, que yo soy Alberto, Alberto con O, el Garzón, pero no el juez ¿eh?



- Las elecciones las he ganado yo, y me da igual quien me llame.



- No te pongas así Mariano, que ahora viene la Semana Santa y todos a descansar unos días. ¿Qué tal veintiún días de vacaciones?



- ¿Veintiún días de vacaciones en plena negociación?, pero estos de Madrid ¿de qué van?



- Arturrrr, mira a ver si te llevas al Albert para allí que ha puesto cara rara por las tres semanas de vacaciones de Semana Santa.

- Tranqui Mariano, que aún es jovencito y ya se irá haciendo a la idea. Mira cómo ha entrado a hacer el tonto electoral y el payaso en la televisión. Todo es cuestión de tiempo. Tú tranquilo que es inofensivo.


- ¿Has visto lo que dice la Colau de mí?

- Déjate de tontadas y pásame el uas de Montoro que estoy sin pasta para pagar la nómina este mes.


- Pásalo, pásalo!!! Que sesenta días no son na!

jueves, 17 de marzo de 2016

829. AMOR, BELLEZA, SEXO Y... POLÍTICA



Los últimos gestos públicos de los podemitas y las declaraciones de amor y belleza subsiguientes al cese fulminante del Secretario de Organización Sergio Pascual, hacen presagiar que la contaminación cursi-amorosa y sexual en la política va a dar mucho juego en los próximos meses. Suele pasar cuando entra gente joven a este circo.


La cosa no es nueva, porque ¿quién no recuerda a Sorayita luciendo piececito en déshabillé, o a Albert Rivera posando como un yogurt cuando fundaron Ciudadanos?:


Buscando los orígenes de la cursilería en la política, me acuerdo perfectamente de la sensación de decepción que me causó el PSOE cuando se presentó a este país con la siniestra imagen del puño y la rosa. ¿Podía haber mayor cursilada?:


El PP intentó entonces estar a la altura de los tiempos, y por no poner una paloma (y menos de la paz) se les ocurrió darse a la poesía con unas gaviotas, esas aves que tienen un canto tan delicado...


Buscando estos logotipos en la red he encontrado un par de irónicos dibujillos alusivos al emblema del PSOE que yo no conocía, pero que a la vista del cuadro que andan pintando todos nuestros políticos bien podrían llegar a ser los mejores logotipos de los votantes:






Y no me acusen de machista que cojo el lápiz y me pongo a paritar

domingo, 13 de marzo de 2016

828. TODO EL ARTE EN TRES CONFERENCIAS DE FÉLIX DE AZÚA




Qué grande es internet. Qué lujo poder asistir desde casa a las tres conferencias que Félix de Azúa impartió en la primera quincena de octubre del año pasado en el Colegio Libre de Eméritos de Madrid volcando en tres horas una síntesis de todo lo que sabe sobre Arte, o especialmente sobre Pintura, que ha sido el arte que más se ha apropiado de la palabra Arte.


Hace falta tener tres horas para escucharlas, claro está, y a poder ser en tres tranquilas sesiones, tal y como se impartieron, y no como me las tragué yo ayer noche, una tras otra las tres en plan maratón.



Arrepentido por haberlo escuchado de forma tan desaforada pongo aquí los tres youtubes para poder tenerlos a mano y volver a escucharlos en una semana más tranquila; o para que disfruten todos los lectores del spyp de todo el saber filosófico y artístico del sr de Azúa. 

sábado, 12 de marzo de 2016

827. JOT DOWN ME CENSURA



Hacer preguntas incómodas no está bien visto por los medios bien vistos. Ayer eché un vistazo a la entrevista que le hacen a la escritora Marta Sanz por la novela con que ha ganado el Premio Herralde, hice unas preguntas en la sección de comentarios y me lo censuraron. 

Me llamó mucho la atención que en el encabezado estuviera la ilustradora Paula Bonet (v SPYP 821) como entrevistadora conjunta con Angel L. Férnandez Recuero, -el mismo Angel L Fernández Recuero que hace un año entrevistaba conjuntamente a las ilustradoras Paula Bonet y Raquel Córcoles (link aquí). 



Ya digo, se me ocurrió preguntar y, prudente que es uno, antes de que la borraran, la guardé en word. Esto es:

A ver Jot Down, seamos un poco serios y respóndanme por favor a unas preguntas: ¿Cuál es el papel de Paula Bonet en esta entrevista…? porque… yo me esperaba un dibujillo (que es lo suyo) que al final no ha aparecido. ¿Era ella la que hacía las preguntas? ¿Era Angel L? ¿Fue a la entrevista porque pasaba por allí? ¿Puso su nombre para que luciera más…? ¿Estaba incluida en las promociones Herralde? etc.
No solo con largas entrevistas se mejora el periodismo -digo. Hay que poner ciertas cartas boca arriba ¿no?

Menos mal que no dije que la entrevista es un rollo monumental y que su único mérito es que me dispense de comprar, por algún descuido mío, la novela de Marta Sanz.


martes, 8 de marzo de 2016

826. PARITACIONES



No confundir con peritaciones, que son los trabajos o estudios hechos por un perito. Ni con las tareas de los paritorios, aunque muchas de las paritaciones sean verdaderas paridas. Paritar es, en primera instancia, descubrir que algo no es paritario, incluso aunque no se sepa muy bien qué pueda ser eso de paritario. Hoy, por ejemplo, día 8 de marzo no es un día paritario, porque oficialmente es el día de la mujer trabajadora y los hombres no trabajamos (yo al menos no he dado ni chapa). Tampoco fue paritaria, otro ejemplo, la Carrera de la Mujer que hace unos meses se celebró en Logroño, porque solo podían correr mujeres. El problema ahora se plantea en saber si es paritaria o no la decisión de organizar una carrera sólo para hombres aunque sea para combatir el cáncer de próstata:


La vi anunciada el otro día en mi calle y de inmediato me puse a paritar: ¿es paritaria una carrera sólo para hombres (incluso aunque sea por el cáncer de próstata) porque hace unos meses se celebró una carrera sólo para mujeres (supongo ahora que pudo ser contra el cáncer de mama /de lo que se deduce que los cánceres no siempre son paritarios y así sucesivamente...)?

Sea como fuere, parecidas paritaciones le han pasado a Pablo Iglesias cuando fue el otro día al Congreso y vio que era de Diputados pero no de Diputadas, por lo que ya ha dicho que va a proponer formalmente quitar lo de Diputados y dejarlo sólo en Congreso.



Acción paritógena que, igual que me pasó con lo del cartel de la carrera, ha vuelto a despertar mis deseos de paritar pensando si no sería mejor quitar también la O de machos y dejarlo en Congrés, que es más inglés.

Y así, paritando paritando,
 se nos va pasando el invierno,
 y llevamos mucho mejor,
 lo de no tener Gobierno. 
(o Gobiern)

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Una amable lectora me advierte de haberme dejado en el tintero una de las más brillantes paritaciones realizadas estos días, la de la alcaldesa de Barcelona proponiendo que cuando se trate de mujeres, en vez de homenajes hay que hacerles donanatges:


Arreglado queda el entuerto pero no me alarmen ustedas, que vamos a tener paritaciones para rato. 

lunes, 7 de marzo de 2016

825. CONGRESO DE LOS TELEPRESENTADORES



Titulan algunos periódicos que Pablo Iglesias convirtió la segunda sesión de investidura en un programa de telebasura hablando de sus besitos con un colega y de los flirtreos entre Andrea Levy, diputada del PP de Cataluña, y uno de sus chicos con melenas, Miguel Vila. Y no les falta razón.


Ya el público empieza a cansarse de Pablo Iglesias y de Mariano Rajoy, y el espectáculo de las Cortes necesita caras nuevas. Aunque la jugada podría interpretarse de otro modo: puesto que para la política ya están los periodistas, es justo que sean los políticos los que presenten desde la tribuna del Congreso los amoríos de la telebasura.


Hablando de amores y entrepiernas o de las televisiones que los del PP han consolidado para los Podemitas, hay quien ya habla del PPodemos, aunque el pueblo bajo y televisivo preferiría votarles juntos bajo las siglas de Pepejodemos. 

824. VAMOS A SEGUIR TRABAJANDO


Nada más salir de la segunda (y fallida) sesión de investidura a la Presidencia de Gobierno (viernes 4 de marzo del 2016), Pedro Sánchez, Pablo Iglesias y Mariano Rajoy han coincidido en decir ante los micrófonos de los periodistas que van a seguir trabajando a partir del lunes por buscar un acuerdo de gobernabilidad. Se da la coincidencia también de que todos los trabajadores de este país van a seguir trabajando a partir del lunes, con lo que todos los políticos y los trabajadores parece que vamos a seguir trabajando a partir del lunes. Pues bien, aunque no haya nada que contar ni tengamos por qué declararlo, también en el SPYP vamos a seguir trabajando a partir del lunes, más que nada para no quedarnos fuera de juego; o también, porque en el SPYP damos por seguro que el día que consigan un acuerdo de gobernabilidad, al salir del Congreso volverán a decir que van a seguir trabajando. Y es que esta gente no para de trabajar.

Fuera bromas, es de suponer que Pedro Sánchez lo decía porque no había trabajado lo suficiente para ganarse la confianza del PP y del PPodemos, y Pablo Iglesias y Mariano Rajoy por no haber trabajado lo suficiente para confiar en Pedro Sánchez.. El único que no dijo que iba a seguir trabajando fue Albert Rivera, lo que cae dentro de toda lógica, porque los de Ciudadanos ya habían hecho su trabajo. Pues nada, a seguir trabajando los tres. Y a poder ser, en hablar mal de Ciudadanos. Por trabajar.

Adenda: Me informa una lectora que se tragó la mayor parte de las dos sesiones de investidura que buena parte de los diputados fueron impuntuales y que muchos de ellos, especialmente del PP, no consiguieron trabajar todas las horas que duraron. Interesante observación. 

823. EXITO Y LUGAR


La necesidad del éxito como forma exagerada del reconocimiento personal, posiblemente sea en estos tiempos una consecuencia directa de la ausencia de patria: aquel que no es reconocido por sus familiares y sus vecinos, aquel que no tiene raíces ni tierra propia donde descansar, busca en la fama lo que ha perdido en la destrucción de sus lazos con el lugar.

(de mi cuaderno de anotaciones, mayo 1995) 

822. ESCENAS DE UN SERIAL



Lo de las chaquetas y las camisas ha empezado a producir ciertos problemas de protocolo en el Congreso de los Diputados y así, el templao de Pachi (vasco el chico), al ver en camisa al camarada Pablo le dijo: oye, que te has pasado de tiempo. ¿Ah si? le dijo sorprendido el descamisado: o sea que me vas a tutear tú a mí, Pachi, ¿con esa corbatilla y esa cara de pringao que tienes...? vale vale. Te vas a enterar...


Pero antes de eso, Pablo ya venía encendido o más bien, descolocado. Sus detractores suelen hacer burla del tono suave y moderado que usaba en la televisión, encajando todo tipo de ataques y contestando como si fuera un jesuita: "Mireee, nosotros no somos de izquierdas ni de derechas, somos gente dialogaaante que buscamos la paaaaz y que no echen a la gente de sus pisos y bla bla bla". (Y en las puestas de escena televisivas hasta llevaba corbatilla y todo).


Pero cuando se puso en la tribuna de las Cortes se olvidó de los platós de la Sexta, pensó que estaba en un mitín, e imaginando el enardecimiento que provoca en las masas lo de hablar a gritos y levantar el puño amenazante, hizo un papelón que para el casting de una película de terror político no tendría precio:



El espectáculo nos está costando un montón de euros y mientras tanto siguen pasando los meses con España a la deriva y la bolsa yéndose a pique. Pero me da que todo el mundo vemos ya esto de los políticos como una serie de televisión (antiguos culebrones) y lo de menos son los problemas del país. Lo importante son las escenas o las sorpresas de cada capítulo.

(Gracias una vez más a las fotos que se publican en internet, sin las cuales no podría redactar estos extractos sobre política y periodismo. El que comento aquí va referido a la primera sesión de investidura de Pedro Sánchez celebrada el 2 de marzo del 2016).

martes, 1 de marzo de 2016

821. PAULA BONET - 2016 - CONFERENCIA EN LA ESDIR



Si alguien me hubiera dicho hace unos años que un ilustrador podría llegar a convertirse en un fenómeno de masas, hubiera pensado que estaba chalado. Bien sé que el don de dibujar tiene un gancho especial, como también lo tiene el de hacer virguerías con un saxofón o con unos patines en los pies; pero ese tipo de habilidades suelen despertar admiración en círculos reducidos y cercanos al artista, que poco o nada tienen que ver con la entrega a que por ejemplo mueve una estrella del rock. Lo cierto es que vivimos en tiempos raros en que los medios de comunicación y las redes sociales juegan con el destino de los humanos como nunca antes había pasado.


Es el caso que unas semanas antes de que viniera la ilustradora Paula Bonet a dar una charla en la Escuela de Diseño de La Rioja, mis alumnos de primer curso de Diseño de Interiores, que apenas conocen a un sólo diseñador y a los que tengo que llevar de la oreja al Salón de Actos cuando llegan las conferencias de las Jornadas de Diseño o viene alguien importante a la Escuela, esos pipiolos de alumnos, digo, ya me estaban preguntando si les iba a dejar ir a la conferencia de Paula Bonet en caso de que coincidiera con mi horario de clases. ¿Paula Bonet? les dije, ¿quién es Paula Bonet?


Después de haberme informado un poco (¡ah!, bien, una dibujante, eso no les hará mucho mal) llegó el viernes 26 de febrero y cerré la clase para ir yo también a ver a Paula Bonet, y al entrar en la atestada sala, me crucé con la Jefe del Departamento de Diseño Gráfico que me dijo si quería que me presentara a la ponente. Como en esos minutos confusos previos a una conferencia no tiene mucho sentido una presentación y yo nunca he tenido afición a saludar por saludar a gente importante, rehusé amablemente la invitación y me fui a sentar a un sillón esquinado de la primera fila, que era de lo poco que quedaba libre.


La conferencia, como suele suceder en estos casos, fue un despropósito (pero no seré yo quien exija a un dibujante que sepa dar conferencias). Paula empezó presentando su último trabajo, un libro sobre Truffaut, hablando de su amor, o mejor dicho, del amor universal a Truffaut, sin darse cuenta de que el noventa por ciento de los alumnos que estaban en la sala no sabían quién era Françoise Truffaut, ni habían visto una sola película suya (y ese dato no me lo puede rebatir nadie porque soy profesor de Cultura del Diseño y cuando les pongo Farenheit 451 pregunto si saben quién fue Truffaut).



Sin venir a cuento dejó empantanada la historia de la creación del libro de Truffaut para ir saltando a otras cosas, por lo que consciente de su desorden expositivo (que tonta no es) pidió a la sala que le interrumpiera cuando quisiera con preguntas o comentarios... Estuve a punto de ser el primero en interrumpir y hacer un comentario hiriente para decirle que cuando te invitan a dar una conferencia (o una clase) hay que dar una conferencia y no dar la voz a los alumnos, quienes por lo general no hacen mas que preguntas tontas descalabrando así cualquier intento de discurso ordenado.


Pero no lo hice, claro está, porque por muy borde que sea yo, todavía tengo a la cortesía por un valor muy superior de convivencia, y porque era mucho mejor ver en pantalla grande el espectáculo de sus dibujos y que se perdiera sola con las historias de sus libros, su vida, sus entrevistas o sus amores, y sobre todo, con los hilos de su éxito y su fama internetera.


Cuando acabó con todo ello vinieron las preguntas (¡trágame tierra!), y desde la primera a la última, ya lo sabía yo, cada cual más tonta. Pero hete aquí que cada pregunta tonta (¿cómo eliges la portada de tus libros? ¿por qué la insistencia en el color rojo?¿porqué dibujas sobre todo retrato? etc), Paula la volvía interesante respondiendo siempre con algo inteligente y entusiasta, y sin apenas darme cuenta empecé a babear en mi asiento como si estuviera a seis metros de mi más adorada estrella del cine.


A veces empezaba su respuesta con alguna frase tan tonta como la pregunta: ¿que por qué dibujo caras? anda ¿y a tí por qué te gusta el vino...? Pero rápidamente entraba en materia: yo siempre quería haber pintado caras. Fui a Bellas Artes a aprender a dibujar caras porque en las caras está todo, porque las caras me dicen mucho; pero como me salían tan mal, en los dibujos al natural le pedía al profesor a ver si podía cortar la cabeza a las figuras. Y como tenía ese deseo (el deseo de pintar el alma, pensé yo por lo bajinis, porque ella quería decirlo pero no le salía, o no quería decirlo porque pudiera parecerle cursi...) como tenía ese deseo, -decía Paula-, insistí e insistí con lo de los rostros y ahí sigo.


Entre eso y sus repetidas declaraciones de entusiasmo por un trabajo tan placentero como dibujar  -"¿pero no os pasa que cada vez que hacéis una raya y le encontráis un sentido experimentáis un placer enorme...?¿pero no os dais cuenta de lo afortunados que somos pudiendo obtener placer en el trabajo?"- yo ya estaba completamente entregado; tan entregado que saqué el facebook, le di a "me gusta" y me convertí en el fan 348.865 de esta tipa.


Me hubiera gustado entonces saludarla o darle mi mano como muestra de agradecimiento por sus dibujos y palabras, pero en cuanto acabó la conferencia se formó una larga fila de alumnos esperando que les firmase un autógrafo o una dedicatoria y renuncié al saludo personal, opté por darle discretamente las gracias a Mónica Yoldi, la Jefe del Departamento de Diseño Gráfico por haberla traído a la Escuela, y me fui a clase a pagar mi óbolo, es decir, a corresponder a Paula con algo que estuviera a la altura de sus méritos.

Nada mejor, pensé en seguida, que enviarle la frase de Truffaut que dio origen en este blog a la sección "diosas spypnic" (v spyp 220) para poder ponerle a ella en uno de sus altares, imaginando que la conferencia de la Escuela no fue otra cosa que una película de esas que empiezan mal pero que al final se hace con las tres estrellas, máximo galardón que aquí damos. Película dirigida por Mónica Yoldi, y en la que José Angel Martín no sé muy bien que papel tiene, pero también salió en la foto:


(Javier Dulín, que estuvo a mi lado haciendo risas y compartiendo entusiasmo por la peli, ha estado un poco más lento, pero ya me he enterado (así de cotilla es facebook) de que es el fan número 348.871 de Paula)

820. PRESENTAR UNA PELICULA



No es lo mismo hacer algunos comentarios a una película (que es lo que he hecho yo más de doscientas veces en este blog y que ahora sigo haciendo en el hijo de este, el spycin) que hacer una crítica, asunto mucho más serio que exige cobrar por ello. Y no es lo mismo comentar o criticar una película que hacer una presentación de la misma ante un público que ha acudido a un cine club o que se ha sentado ante la pantalla de la televisión a verla.

No sé quién me enseñó que los griegos veían teatro (el cine de su tiempo) perfectamente informados del tema, del planteamiento, del argumento y del desenlace de la historia expuesta en la obra, y que de ese modo no eran esclavos de la secuencia y del suspense, es decir, del tiempo. Eran espectadores del destino y de los detalles con que se presenta. No sé quién me lo enseñó, decía, ni sé si es cierto, pero lo aprendí muy bien y nunca se me ha olvidado porque es así como me gusta a mí ver el cine, y por extensión, la vida. Tanto es así que no solo no me importa ver un partido de fútbol o una carrera de motos sabiendo de antemano el resultado, sino que incluso lo prefiero. El problema es que a mi alrededor veo que la mayoría de la gente no comparte mis gustos y que prefieren disfrutar del gusanillo de la incertidumbre. Con un público mayoritariamente así, presentar una película es contar las cosas a medias o decir medias verdades, que es algo que tampoco me ha gustado mucho. Dar unos pocos datos, acaso los del tema o del planteamiento de la película y callarte los más importantes. Abrir un tema, y abandonarlo enseguida.

De niño todo el mundo adoraba a Alfonso Sánchez, presentador oficial de películas en televisión (arriba en la foto), pero creo yo que era por esa pintilla de funcionario que tenía, por su gesto serio, el humor soterrado y esa voz gangosa tan opuesta a lo que se podía entender por el aterciopelado sonido gutural de un locutor de radio o televisión. Con esos ingredientes, Alfonso Sánchez era un auténtico showman y es por ello, seguramente, que gustaba tanto.

El martes 23 de febrero me invitaron a presentar una película en el cine-club de mi ciudad, y a mí el micrófono siempre me ha dado mucho miedo. Mi facilidad de palabra es nula y siempre me pongo nervioso cuando hablo para más de tres personas a la vez. Hasta en mis clases y con alumnos adolescentes me suelo quedar cortado a veces. Pero no sé qué pasó, si fue la cerveza que ve bebí antes de subir al escenario o si fue que estaba escrito que así fuera, o que fui otro del que soy, el caso es que José Angel Martín me dijo al salir del cine que no sabía de mis cualidades de showman (!). Quién sabe. Lo mismo me sentí inspirado por Alfonso Sánchez.


(la foto tiene también su aquel porque no tengo ni idea de quién la hizo, pero me llegó esa misma noche del 23 de febrero del 2016 en un whatsapp desde Suiza (!))

819. ESE LATÍN DEL NORTE


 Aunque como decía en el post anterior, el blog de Antonio Casado da Rocha me causara alguna que otra decepción y no pocas dudas, entre tanta cita y poema prestado es lógico que encontrara alguna buena perla o cuando menos, un hilo que seguir, un recuerdo.

El 29 de Enero del 2014 el profesor de Etica de San Sebastián copiaba y pegaba en su blog un curioso párrafo sobre el islandés y sus silencios sacado de una novela del escritor Hallgrímur Helgason, que no está mal leer, y que inevitablemente me llevó a un poema de Borges dedicado a Islandia y su lengua:

(...)
Cuando el cuerpo se cansa de su hombre,
Cuando el fuego declina y ya es ceniza,
Bien está el resignado aprendizaje
De una empresa infinita; yo he elegido
El de tu lengua, ese latín del Norte
Que abarcó las estepas y los mares
De un hemisferio y resonó en Bizancio
Y en las márgenes vírgenes de América.
(...)

Ya había puesto yo la foto de Helgason en el encabezamiento de este post cuando encontré en el blog de Casado otro párrafo del mismo autor y de la misma novela sobre cómo explicar la crisis islandesa a los niños, y como vi rápidamente de qué pie cojeaba (eso de que el fascismo es el padre del capitalismo debe de ser de una saga islandesa compuesta por aspirantes a Varufakis o Monederos) pensé que mejor evitar su hosco careto, y poner una foto más divertida de Borges con un pirao islandés que encontré en un post de otro blog mucho más ameno (Omar González/Las mil notas y una nota) sobre el papel que jugó Islandia en su vida amorosa con Maria Kodama.

Como recordaba haber leído alguna cosa curiosa de Borges sobre el islandés, he rebuscado entre mis libros y he vuelto a dar con su trabajo sobre LAS KENNIGAR. Estaba colocado dentro de la HISTORIA DE LA ETERNIDAD, y luce muy bien ahí porque como decía el recopilador del siglo XIII Snorri Sturluson,  "... se dirigen a quienes buscan la virtud de entender lo que se escribió con misterio".

O sea, a mí mismo, empeñado como estoy en desentrañar los misterios de la poesía en el podemismo o las conexiones entre la lírica y la avidez de poder.

818. VOLAR - 2016 - HENRY D. THOREAU



Suelo encontrarme con Poti (José Ignacio Foronda) por la calle e intercambiar unas cuantas frases sobre nuestros últimos descubrimientos musicales o sobre cómo nos va la vida; y si la hora es propicia, alargamos un poco el encuentro tomando un café. Poti es de las pocas personas de esta ciudad que es verdaderamente amable conmigo, un tipo con el que no me tengo que poner en guardia y que tampoco lo hace él cuando me ve. Nos contamos de vez en cuando lo poco que hacemos o sabemos, y quedamos hasta el siguiente encuentro casual. Hace unas semanas, o unos meses quizás, me contó que andaba preparando un libro sobre Thoreau y los pájaros. Una historia muy bonita, me contó, que nació de la elogiosa reseña que un profesor de Ética en San Sebastián le había hecho de DIAS BAJO EL CIELO, su libro de paseos en Tudelilla comentado aquí en el spyp 259. Agradecido por ello, Poti se puso en contacto con Antonio Casado da Rocha, que así se llama el profesor; éste le propuso el proyecto de hacer un libro con una selección de párrafos de Thoreau sobre pájaros; Pepitas de Calabaza, o sea, Julián La Calle (héroe spyp como uds ya saben) apoyó el proyecto; y el sábado 20 de febrero del 2016 lo presentaron en el Café Bretón. Yo tenía anotada en mi agenda esa fecha desde hacía mucho tiempo, y esperaba con tanta ilusión ese día que creía que el Café Bretón iba a estar lleno a rebosar para recibir el libro de Poti. Pero si quitamos la gran mesa de familiares y otras cuatro o cinco de personajes que van a este tipo de cosas como por obligación cultural, bien se podría decir que el Poti y su amigo estuvieron más solos que Thoreau en su cabaña de Walden. Se ve que tengo un ojo de águila para las cosas estas del éxito. O que la gente de Logroño es así... Pero bueno, sigamos. La presentación fue muy hermosa. Poti empezó un poco envarado con el chiste de que estaba previsto que Thoreau asistiera a la presentación pero que no había podido llegar y que empezarían sin él. Ahora bien, pasado ese mal trago del arranque, todo fue sobre ruedas. Con el auxilio de una televisión en la que ponían las láminas de los pájaros de Thoreau (que no están en el libro), Poti y el profesor Casado se fueron pasando la palabra del uno al otro diciendo cosas muy bonitas y nada cursis, lo que cada vez es más difícil cuando de elegías y poesía se trata. Por ejemplo, Poti contó que la primera traductora de Thoreau al castellano fue nada menos que nuestra paisana María de la O Lejarraga, con lo que Thoreau parece que tiene alguna querencia con La Rioja; y Casado dijo que más que los pájaros, a él le interesaban las personas que se interesan por los pájaros. No sé por qué, en ese momento me dio por pensar que los pájaros son más fugaces aún que las flores, porque apenas se dejan ver, y cuando alguna vez te pones a escuchar su canto, levantan su vuelo y te dejan con las ganas. Cuando leí DIAS BAJO EL CIELO pensé que debería poner mayor atención en los pájaros, pero sigo sin cumplir el propósito. Abstraído en mis pensamientos, de repente me fijé en un pájaro que estaba apoyado en la mampara de cristal que divide las dos zonas de estar de la parte alta del café y le hice una foto.


Colo Cortés, el dueño del Café Bretón, lugar donde se hacen todas las presentaciones de libros de Julián y de otros certámenes literarios locales, es un tipo curioso al que llevo viendo durante toda mi vida en esta ciudad y con el que no creo haber cruzado una palabra. Escuchando los textos de Thoreau que Poti y Casado iban entresacando del libro a modo de ejemplos, me di cuenta de que estaba pasando un momento delicioso y pensé que en buena parte se lo debía a él. Cuando yo empecé a trabajar como profesor en la Escuela de Artes y Oficios, Colo era el conserje de la Industrial, o sea, del piso de abajo. Qué personaje tan interesante, pensé. Qué cambio dio a su vida. Y que orientación le dio a su negocio ¿no? Luego ha sido por siempre el dueño del café Bretón, con un cambio de local que a punto estuvo de quebrar su industria, y que dejé reflejado en una crónica del LHD (Cafe Bretón, viernes 6 de octubre del 2006).


De vuelta a casa toca ahora leer a Thoreau, un personaje que, a diferencia de Whitman, por poner un ejemplo cercano, nunca me había despertado especial simpatía. Fíjense que la primera vez que escuché la palabra Walden fue cuando llamaron así a esta masa de viviendas hecha en una vieja cementera cercana a  Barcelona con proyecto del arquitecto Ricardo Bofill.


Ahora, cuando veo la reproducción de la cabaña de Thoreau junto al lago de Walden lo primero que pienso es que las autoridades urbanísticas nunca te darían licencia para construirla. ¿Está usted loco?


Ya sabéis que lo de la cabaña es un tema que me fascina. No sé si recordáis que por un blog u otro he dejado varias de huellas de ello. Si clicláis en la etiqueta "cabaña" de este blog vais directos a mi comentario sobre TODAS LAS MAÑANAS DE MUNDO, y en edificios LHD he escrito sobre la cabaña de Julio Villar, la de Heidegger o en la que me gustaría pasar siempre las navidades. Pero también me fascinan los lagos aunque a ellos les he dedicado menos líneas:


Fue un tarde, hace muchos años, en Bañolas, cuando al acercarme al borde de su lago sentí en toda su profundidad la suerte de poder vivir junto a una lámina de agua tranquila. No hizo mala elección Thoreau para instalar su cabaña y poder bañarse en el lago Walden cada mañana.

Con todo eso de la vuelta a la naturaleza (?), la desobediencia civil y el movimiento de los indignados, dicen que Thoreau está muy de moda. Pero a mí, la prosa de Walden se me hace un poco indigesta y sus frases célebres me suenan con los ecos huecos de toda esa patulea mediática televisiva del podemismo asambleario y cultureta.

He leído unos cuantos de los párrafos seleccionados por Poti y Casado y suenan mejor que Walden. Me suenan a DIAS BAJO EL CIELO, o a la dicción tan amable del profesor de Etica de San Sebastián que tanto agradó a Rosalía (aunque..., bueno..., he curioseado en su blog y veo que tiene al podemita  Jorge Riechmann como santo de su devoción (!!!), y hasta me da que en muchos de sus posts busca en la poesía -ojalá me equivoque- más pose que Verdad). Esto último me desconcierta un poco, pero bueno, en cualquier caso iré leyendo los fragmentos de VOLAR bajo la influencia del buen rato de su presentación. Y a ver si con ello me fijo un poco más en los pájaros. Aunque sean de los sin plumas. O de los sin pluma.