domingo, 2 de octubre de 2011

223. OBRA BUENA, CRÍTICO PÉSIMO

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Iba por la mitad de la estupendísima última novela de Houellebecq cuando por aquello de estar en la playa tuve la debilidad de comprar un periódico con suplemento cultural y di con una "crítica" del libro que de puro mala daba risa. La firmaba el tal IGNACIO ECHEVARRIA, un tipo del que no solía leer mucho pero que me empezó a caer bien cuando le echaron de ELPAIS por poner de chupa domine a ese escritor vasco con cara de monja de la cuadra de Polanco.

Como no conocía al tal Echevarría he buscado su foto en internet y me he encontrado que es igualito al expresidente riojano José María de Miguel cuando no tenía el pelo blanco y corto.



Como más del noventa por ciento de todo lo que se hace y publica es malo de solemnidad, los críticos que dan caña suelen acertar al menos en un noventa por ciento, je je. Pero eso sí, cuando la cagan ante una obra maestra quedan a la altura del betún. Pobre Echevarría. De esta no levanta cabeza. Al menos conmigo. Porque si la novela de Houellebecq era buena hacia la mitad, la segunda parte, y sobre todo el final, es de echar cohetes.

De Houellebecq me gustaron mucho PLATAFORMA y POSIBILIDAD DE UNA ISLA, novela esta última que según tengo entendido destrozó el propio Houellebecq llevándola él mismo al cine, por lo que es curioso que ya nadie hable de ella. Como es pronto para releer otra vez EL MAPA Y EL TERRITORIO (cosa que seguro haré si hay salud) me he puesto a buscar en las estanterías la POSIBILIDAD y...¡no la encuentro! ¿A quién se la he dejado y no me la ha devuelto? ¿O quién me la ha cogido sin avisar...? Ya la estáis devolviendo que más vale releer estas novelas de Houellebecq que aburrirse con tanto que se publica por ahí.
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