martes, 27 de enero de 2009

LA GUERRA Y LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN



Ayer lunes traían los periódicos una noticia sorprendente y novedosa: la de la posible persecución legal fuera de sus fronteras de los soldados israelíes que han tomado parte en el último episodio bélico entre su país y los palestinos de Hamas.

No contentos con haber ganado la victoria informativa (todos los medios no han dejado de decir que la guerra de la información la han ganado los palestinos, o sea, los propios periodistas) las sociedades de la información, capaces de identificar al personal de los ejércitos bien organizados, amenazan ahora con atacar a los soldados del bando judío.

El ejército israelí se lo ha tomado tan en serio que ha señalado a España, Reino Unido y algún otro país que no recuerdo, como lugares peligrosos para el turismo de sus soldados, y se ha planteado que en la próxima batalla los soldados lleven pasamontañas (como los policías o los terroristas de aquí) y no se dejen fotografiar por los periodistas.

Lo curioso del caso es que los medios de información occidentales no se hayan plantado también perseguir a los miembros de Hamas que disparaban bombas sobre la población civil israelí. Y eso que la mayor parte de las fotos de esta guerra provenían de Gaza. Se podría concluir que la actual sociedad de a información está mucho más cerca del sentimentalismo de los damnificados por las bombas que de las razones de Estado (seguramente porque las fotos o los vídeos del horror de las guerras venden muchos más periódicos y horas de televisión con anuncios). Claro que cuando la sociedad de la información ataca, bien que pretende utilizar los aparatos del Estado.