lunes, 10 de enero de 2022

939. SIGO CON LOS CROMOS

 


Cambiamos de año pero yo sigo con los cromos periodístico-políticos. Parece que le he encontrado gracia al formato. Cromos y cromitos, porque los cromos a veces tienen reverberaciones. Aquí van los dos primeros: el mismo día en que Concha Andreu, la Presidente del Gobierno de la Rioja, echaba de su gabinete a la consejera de Salud (sexta de los consejeros cesados de nueve que nombró, glup) recibió a los Reyes Magos y nos regaló esta pieza tan cómica. ¿O surrealista? Dejaros de incienso y mirra y traedme más consejeros, porfa. 


Cromito: el señor Alcalde de Logroño no quiso ser menos que la Presidente, pero como la foto con la realeza se la hizo en el campo de fútbol, adoptó una pose más deportiva y se rodeó hasta de un militar que no se sabe si es de la comitiva real, de la municipal o que pasaba por allí. Buen disfraz pilló el tipo, sí señor. La armada está de vuelta. 


Y si no me creen, que se lo pregunten a los kazajos, que esta semana han visto cómo Rusia les enviaba una partida de paracaidistas para que no mataran a su venerado presidente Nursultán Nazarbayev. Con motivo de las revueltas en Kazajistan me di una vuelta por Astaná (ahora llamada Nursultán, glup) y Almati, para ver arquitectura, y a fe que vi marafillas. En el 2017 vivía yo tan feliz con la recién estrenada jubilación que no me enteré de que hicieron la EXPO allí y que la política-popular Ana Pastor inauguró nuestro pabellón con una prograda sobre las energías limpias que no la hubieran igualado ni los sociatas. Pero bueno, EXPO mundial aparte, todo Astaná es una expo de despilfarros arquitectónicos que ríete de lo publicado en Cascotes sobre la materia. Foster fue sin duda el campeón de un ferial que me sirvió para descubrir a un italiano metido en esos saraos, un tal Manfredi Nicoletti al que le tendré que dedicar un Cascotes sin remedio. Pero el cromo que ilustra todo ello lo encontré mirando a ver qué le habría tocado a Calatrava en el reparto. Se ve que quiso hacer un dome tan grande que no hizo nada. Quizás porque envió a su hijo a convencer a Nazarbayev, y se quedó sin palabras ante el decorado de la sala. 


Visto el escaso éxito del hijo, se ve que tuvo que acudir luego el padre a una mesa de negocios menos vistosa, pero ya era tarde; por lo que nos quedamos sin dome; pero al menos sacamos un cromito como complemento del anterior 


El tercer y último cromo de esta primera semana del año es sobre el tipo de fiestas que parecen haberse popularizado en el Vasque Country, no sea que vayamos a olvidar el nivel de las gentes que pueblan sus calles. Así se entienden mejor esos folletos turísticos redactados en inglés que traen fotos de playas o montes y apelan al corazón...:


Salud.