¿Qué fue de Gordon Lightfoot? ¿Cómo diablos llegó a nuestra pequeña discografía de vinilos? Leo en la red que hace unos años iba él en el coche y oyó por la radio que había muerto. No era tan viejo, apenas había pasado de los setenta. Me entero ahora que es de Ontario, Canadá, país al que seguramente volaremos este verano. Mira que casualidad. Esta segunda foto que pongo aquí es de la entrevista en la que contó que aún estaba vivo:
Lo que no consigo resolver es la segunda pregunta. Fue en los años de Bilbao, y a Rosalía le encantaba lo melodioso de su voz. ¿Folk? ¿Country? Nos daba igual. Lo oímos cientos de veces. Endulzó mucho el pasillo de nuestra primera casa.
Seguro que aquel doble LP nos costaría un congo. Comprar un disco era algo que había que pensarse mucho. Luego, en los tiempos del cassete en el coche, me lo autopirateé y lo grabé en cinta para oírlo mientras iba por la autopista. No sé si el FBI y los de la Ceja me dejarían ahora haceros otra copia de aquel vinilo que aún suena muy bien en el tocadiscos de la galería. Lo que es seguro es que les va a joder mucho que lo disfrutemos todos, porque eso de ver feliz a la gente parece que les duele mucho a los defensores de la propiedad intelectual (que por cierto, son los mismos que no hace mucho querían abolir todo tipo de propiedad, ja ja ja ja). Os lo pongo en Dropbox y os dejo aquí una actuación suya de 1974.