Toda la izquierda extrem les tiene manía porque llevan corbata, pero Mariano y Montoro son en realidad dos revolucionarios disfrazados que sin revolución alguna (o con una revolución disfrazada) y a golpe de subida tras subida de impuestos (requisas disfrazadas), están poco a poco llevando a España al sueño que jamás podría imaginar ningún revolucionario de izquierdas: a la verdadera Unión de Naciones Socialistas Soviéticas donde el Estado lo será todo y la Sociedad nada. Bueno, el viejo Estado español en realidad se disolverá en la Unión de Naciones (que no de Repúblicas), una especie de Commonwealth de Autonomías Autonomizadas reinada por Felipe VI con discurso optativo de Navidad, mientras que las dos S.S. tanto nos va a dar que sirvan para la Seguridad Social como para el Secret Service. Lo importante es la Unión en el desastre que se está logrando. Dicen que hasta los Ciudadanos están ya bajando la cabeza y que aplauden con las orejas la tendencia hacia el desplume general que acaba de perpetrar esta parejita de iluminados, que seguro que saben que el año que viene se cumplen 100 añitos de la aquella otra revolución mucho más violenta y aparatosa que se llevó por delante millones de vidas y acabó como el rosario de la aurora una noche de 1989. Pero bueno, hasta el 2089 falta mucho, y mientras tanto, estos dos están decididos a hacer historia: ¿España? ¿Alguien se acuerda qué era eso? La UNSS es el futuro. Y es que, entre otras cosas, al PSOE sin jefes y en plan soviets es lo que más le gusta. Porque el PP sin escaños tampoco podría hacerlo solo. En fin que ¡viva la UNSS!
(foto secreta de M y M conspirando y sin corbata)